
Cómo juega el efecto Cristina en los armados electorales de la Provincia
Kicillof y su apuesta por el pragmatismo electoral. La mesa de negociación peronista: un desafío a la unidad. El PRO bonaerense y la encrucijada libertaria.
En medio de los crecientes rumores sobre una eventual candidatura de Cristina Fernández de Kirchner por la Tercera Sección Electoral, este fin de semana apareció un sugestivo cartel en Quilmes con la leyenda “Cristina 2025”. La ciudad, bastión político de La Cámpora, vuelve a posicionarse como un escenario estratégico dentro del tablero del peronismo bonaerense.
POLÍTICA 05 de mayo de 2025 Daniel MuñonettoAl frente de ese bastión está Mayra Mendoza, la dirigente que encarna como pocas el ADN camporista. Intendenta de Quilmes desde 2019 y reelegida en 2023 con más del 50% de los votos, Mendoza es considerada “la perla” de La Cámpora y su principal referente territorial. Pero su liderazgo trasciende lo local: es una de las voces más influyentes del espacio fundado por Máximo Kirchner y una figura en ascenso dentro del peronismo nacional.
Miembro fundadora de La Cámpora, Mayra fue la única mujer que integró la mesa nacional de conducción de la organización. Diputada nacional entre 2011 y 2019, se consolidó como un símbolo de la renovación y de la militancia comprometida. Hoy, combina su gestión al frente del municipio con un rol cada vez más activo en la política provincial, donde mantiene una sintonía total con el kirchnerismo más ortodoxo. No son pocos los que la mencionan como posible candidata a un cargo ejecutivo de mayor jerarquía en 2027.
Dentro de las tensiones internas del Frente de Todos —especialmente entre La Cámpora y el sector que responde al gobernador Axel Kicillof— Mendoza emerge como una de las principales impulsoras del operativo clamor por Cristina. Fiel defensora del liderazgo de la ex presidenta, sostiene que su figura sigue siendo indispensable para enfrentar los desafíos del país y reordenar al peronismo. Desde su territorio, con discurso claro y compromiso militante, repite con convicción: “No hay futuro sin Cristina”.
Este sábado, Quilmes fue sede de las jornadas solidarias nacionales “Papa Francisco”, organizadas por La Cámpora en distintos puntos del país. El evento contó con la presencia de Máximo Kirchner, un gesto de apoyo que no pasó desapercibido. La visita del líder camporista fue una clara señal de respaldo a Mendoza, a quien considera una pieza fundamental por su capacidad de gestión, su lealtad política y su proyección de liderazgo.
Mayra, además, cuenta con una bendición que pocos pueden exhibir: es la niña mimada de Cristina. La ex mandataria no oculta su predilección por la intendenta quilmeña, a quien ve como una dirigente de futuro, con sensibilidad social, formación política y fidelidad incuestionable.
Con un estilo juvenil y directo, que se refleja tanto en su forma de comunicar como en su manera de vincularse con la militancia, Mendoza logra conectar especialmente con los sectores jóvenes, un segmento donde el peronismo tradicional ha perdido terreno en los últimos años. Su impronta de cercanía, presencia constante en el territorio y fuerte respaldo de las bases militantes consolidan su lugar como una de las figuras más prometedoras del peronismo actual.
Su proyección ya no se limita al conurbano bonaerense: Mayra Mendoza se perfila como una potencial heredera del liderazgo político de La Cámpora y una protagonista central en la disputa interna que definirá el rumbo del peronismo hacia 2027.
Kicillof y su apuesta por el pragmatismo electoral. La mesa de negociación peronista: un desafío a la unidad. El PRO bonaerense y la encrucijada libertaria.
El Partido Justicialista reunió a más de 300.000 personas frente a la Casa de Gobierno. Todos los espacios que componen al peronismo estuvieron presentes, incluido Axel Kicillof. Desde su departamento, la expresidenta grabó un mensaje y apuntó contra la Corte Suprema, el poder económico y el actual Gobierno nacional.
El mundo atraviesa un momento de enorme tensión. Recrudece Medio Oriente. En Estados Unidos asesinan a una congresista demócrata y a su marido. Apresan por unas horas a un senador demócrata que preguntó por la “caza” que realiza el gobierno de Trump sobre los inmigrantes.
La proscripción política de Cristina Fernández de Kirchner no sólo marca un punto de inflexión para el kirchnerismo, sino que también reconfigura el mapa interno del peronismo. Una de las preguntas que se impone en este nuevo escenario es: ¿qué pasará con los principales alfiles de La Cámpora, especialmente sus intendentes y aliados en la provincia de Buenos Aires?
El pampeano Sergio Ziliotto fue el portavoz de la reducida comitiva de gobernadores que se reunió con el jefe de gabinete, Guillermo Francos, para llevar el reclamo y la propuesta de todos sus pares, por la situación fiscal que se agrava mes a mes.
La reciente detención de Cristina Fernández de Kirchner, junto con su consecuente proscripción política, generó un cimbronazo dentro del peronismo. Lejos de producir una reacción unificada, el movimiento vuelve a exhibir una de sus fracturas más profundas: la disputa entre La Cámpora y el sector que responde al gobernador bonaerense Axel Kicillof.