
La industria atraviesa una crisis profunda que parece muy difícil de remontar, en vista de la baja de los precios internacionales. Los empresarios del sector reclaman una mayor desregulación y se quejan de que el gobierno de Milei hace exactamente lo contrario. También la Provincia lanza críticas a la administración libertaria. La pesca del langostino, en el centro de la debacle.