
China comenzó 2025 con un crecimiento económico del 5,4% interanual durante el primer trimestre, superando las previsiones de analistas y reforzando su objetivo oficial de crecimiento “en torno al 5%” para el año. Este sólido desempeño económico se produce en un contexto de creciente incertidumbre global, especialmente marcada por la intensificación de la guerra comercial con Estados Unidos tras el regreso de Donald Trump a la Casa Blanca.