
Lanzamos una hipótesis un tanto audaz: el cambio de ánimo de la gente respecto del ajuste de Milei tiene que ver con que, al fin, una variable de la economía que parecía lejana ahora se incorporó a la vida en los hogares.
Los primeros días de noviembre registraron aumentos de hasta el 3,8% en servicios y bienes de consumo, Osvaldo Bassano, director del Instituto de Derechos del Consumidor, advirtió “estamos en una situación bastante peligrosa”.
ECONOMÍA04 de noviembre de 2025 Juan Salguero Simoy
El mes de noviembre llegó con aumento en servicios esenciales y bienes de consumo que ya se encuentran impactando directamente en el bolsillo de los y las argentinas. Las actualizaciones en las tarifas de gas y luz, las subas de las prepagas y combustibles, dispuestas por el Gobierno Nacional y su desregulación en pos del “libre mercado”, van nuevamente a contramano del número de inflación dado por el INDEC.
En septiembre el Instituto Nacional de Estadística y Censos de la República Argentina (INDEC) mostró una cifra inflacionaria del 2,1%, inclusive desde Casa Rosada se espera que en octubre el número se mantenga o en el peor de los casos que no supere el 2,5%. Aun así, con subas del 3,8% en tarifas energéticas, 2,8% en prepagas, 4,1% en transporte y 3% en telecomunicaciones, la realidad en cuanto a los aumentos y su impacto parece ser otra.
Además, los combustibles registraron una suba de $16,41 en el caso de la nafta y $14,22 en el gasoil. Lo que repercute directamente en el valor de los alimentos, por los mecanismos de distribución vía terrestre. En este marco, el Centro de Estudios para la Recuperación Argentina de la Universidad de Buenos Aires realizó un informe, utilizando de fuente al INDEC, donde se muestra que 5 de cada 10 argentinos se endeuda para pagar compras en supermercados. Las cifras son impactantes.
En POLITICAR dialogamos sobre los nuevos aumentos con Osvaldo Bassano, director del Instituto de Derechos del Consumidor:
¿Los aumentos que se están viendo en estos primeros días de noviembre están por encima del número de inflación que se espera?
Nosotros terminamos en estos primeros días las mediciones de aumentos y tenemos casi entre el 2 y el 3,5% de incremento en alimentos y productos de limpieza. Lo que muestra un fuerte impacto de incrementos que según hemos comenzado a observar van a ser aún mayor si se efectiviza, por ejemplo, el incremento de la carne.
Tanto las tarifas de transporte que se han incrementado entre tres y cuatro veces, sumado a la nafta y servicios de luz, gas, agua y comunicaciones, muestra que los incrementos han sido superiores a cualquier índice de inflación.
¿La quita de subsidios a tarifas de luz y gas que impactó pueden tener?
En el caso de los servicios energéticos hay tres puntos a tener en cuenta. Primero el aumento de la tarifa por la quita del subsidio, como bien dijiste. Segundo por la forma de facturarlo y el tercero que al principio del mes pasado se dolarizó la generación de energía. Esto va a influir de forma directa en la factura del consumidor, va a significar incrementos superiores a los que se están anunciando. Porque ahora se están anunciando entre un 3 y un 5% aproximadamente, muy por encima de lo que es la inflación. Pero dependiendo del consumo, pueden sobrepasar el 10 y el 15%.
¿Cómo se protege al consumidor en este contexto?
Mire, se debería hacer una modificación muy profunda del sistema, pero lamentablemente esto depende de la Cámara de Senadores y de la Cámara de Diputados.
Yo tengo muy claro que ha habido un retroceso en la defensa de los derechos de los consumidores muy grande en estos últimos 2 años. Que significa que sigamos pagando para no recibir la correcta prestación del servicio por un lado y por otro lado no respetar lo que dice la Constitución sobre la protección económica del consumidor.
¿La problemática principal es el desfase de los salarios en relación a los aumentos y costo de vida?
Mirá, hay 68% de la población que no gana más de 1.200.000 pesos. El otro 40 o 50% no supera los 600.000 pesos. Estamos hablando de que se venden teléfonos celulares para comer y se endeudan con tarjeta de crédito para poder comprar alimentos. Estamos en una situación bastante peligrosa.
Si uno no gana no va a poder consumir, pero también el que vende el consumo tiene que darse cuenta que la realidad cambió, porque evidentemente si uno no gana no puede consumir. Pero también tiene que estar el Estado con normas protectoras de las personas. Eso es un derecho universal.
Cuando la población ante la falta de pan, de carne, de leche o de energía eléctrica o de gas o directamente en estado de desesperación comienza a estallar. Bueno, no sé, están esperando eso. Hay leyes que urgentemente deben modificarse para que no se les quite los derechos a los consumidores.

Lanzamos una hipótesis un tanto audaz: el cambio de ánimo de la gente respecto del ajuste de Milei tiene que ver con que, al fin, una variable de la economía que parecía lejana ahora se incorporó a la vida en los hogares.

Por segunda vez en menos de una década, Argentina es el país más endeudado del mundo con el FMI. Y por segunda vez, lo hizo sin cumplir las reglas que el propio organismo se impuso para evitar estos desastres, ni las reglas que se impuso el propio país. Los problemas los vamos a pagar por varias generaciones.

La caída del consumo en Argentina se profundiza mes a mes y ya se siente con fuerza en todas las provincias. La pérdida del poder adquisitivo de los salarios aparece como el principal motor de este fenómeno, que afecta directamente la economía doméstica y pone en jaque a los pequeños comercios.

La inflación ha sido históricamente uno de los principales flagelos económicos de Argentina. Ningún gobierno, sin importar su signo político, ha logrado erradicarla por completo. En ese contexto, la actual gestión de Javier Milei sostiene que está logrando “controlarla”. Sin embargo, los datos muestran una realidad más compleja y preocupante: aunque el índice de precios al consumidor empieza a desacelerarse, el consumo interno se desploma.

En un contexto económico marcado por la desaceleración inflacionaria y las presiones cambiarias, la consultora Suramericana Visión presentó su último Panorama Económico Semanal, en el que analiza los desafíos macroeconómicos actuales, el comportamiento del dólar, las reservas del Banco Central y las posibles medidas de política monetaria que podrían adoptarse en el corto y mediano plazo.

En un nuevo informe semanal, el think tank de Martín Guzmán, Suramericana Visión, publicó los datos económicos más relevantes del período correspondiente a la segunda semana de diciembre. A un año de la asunción de Javier Milei, la industria continúa su caída mientras que la inflación de noviembre mostró su porcentaje más bajo desde julio de 2020.