
Con todo lo que tuvo de sorpresivo, el triunfo de La Libertad Avanza en prácticamente todo el país puede entenderse a la luz de una serie de fenómenos que ya eran visibles y formaban parte de la agenda de la disusión pública. Sobresale, en particular, la dificultad del peronismo para ofrecer una salida que no descanse en la nostalgia por un pasado que, para muchos votantes, ya es remoto.







